
El día de ayer el mundo del football colegial se sacudió al darse a conocer la noticia de que Jim Tressel renunciaba a su puesto como head coach de los Ohio State Buckeyes. Y la verdad no era para menos. Uno de los coaches más exitosos en la historia de esta universidad tenía que dejar su cargo por problemas ajenos a los resultados. Pero a la vez es lo mejor que podía hacer. Me explico.