El draft siempre trae sorpresas. Por ejemplo: cuando los Saints añadieron a Adrian Peterson todos asumimos que ya no iban a buscar otro RB, sobre todo porque ya tienen a Mark Ingram. Los Saints decidieron ir en contra de esa idea, tomando a Alvin Kamara en el tercer round.
De hecho, los Saints hicieron un cambio para subir y tomarlo en el puesto 67 global. Y aunque pudiera parecer un exceso añadirlo a un backfield que ya tiene a Ingram y Peterson, tiene cierto sentido.
Kamara no es un RB tradicional, ya que en Tennessee lo usaron más para jugadas específicas, y tuvo una producción muy elevada (6.5 yardas por acarreo). Eso es un elemento que puede aportar versatilidad a los corredores que ya tienen los Saints, y sería la razón por la que lo tomaron.
Y bueno, está de más decir que un backfield con Mark Ingram, Adrian Peterson y Alvin Kamara es una excelente noticia para Drew Brees.
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