Iowa está contento de haber llegado al Insight Bowl. Oklahoma seguramente no. La cuestión aquí es que las expectativas eran muy distintas al inicio de la temporada.
Los Sooners eran el equipo número 1 en los rankings de pretemporada, así que terminar en el lugar 19 y jugando un tazón de diciembre suena como un fracaso enorme. Para los Hawkeyes las cosas no son tan malas, pues nadie esperaba que fueran contendientes en el Big Ten, menos en el ámbito nacional.
Los Sooners (9-3) perdieron por primera vez en su historia con Baylor y al final del año perdieron un posible boleto a un tazón del BCS al ser masacrados por Oklahoma State 44-10.
A esas dos derrotas hay que sumarle que que Texas Tech les ganó 41-38 para romper una racha de 39 victorias como local, así que el resultado final (jugar hoy en el Insight Bowl) es normal.
El que espera mantener un buen ritmo es Landry Jones, QB de Oklahoma. Landry pasó para 4,302 yardas y 28 TDs, pero tuvo 14 intercepciones, empatado al top del Big 12. El juego aéreo de los Sooners es su fuerte, sobre todo desde la lesión de Dominique Whaley, su líder corredor. Y si consideramos que Iowa tiene la peor defensiva contra el pase del Big Ten entonces es de esperar que ese sea el ángulo que ataquen los Sooners.
Otra lesión que le afecta a los Sooners es la de Ryan Broyles, el líder histórico en recepciones dentro de la NCAA (349). Desde que Broyles dejó de jugar Jones tiene 5 intercepciones y 0 pases de TD.
Si a eso le sumamos las lesiones del WR Jaz Reynolds, el RB Brandon Williams y el FB Aaron Ripkowski es un hecho que el equipo de Bob Stoops tendrá que echar mano de los elementos que tengan sanos.
Iowa (7-5), por su lado, llega sin presiones. Ellos no entraron al Top 25 en todo el año y no recibieron ni un solo voto en la última lista. Esto viene en gran parte porque perdieron sus últimos 3 juegos.
Curiosamente el año pasado fue igual. Los Hawkeyes cerraron muy mal la temporada regular pero ganaron el Insight Bowl ante un rival rankeado. El año anterior ganaron este mismo juego 27-24 ante Missouri, entonces lugar 14 en los rankings.
El problema para el equipo de Kirk Ferentz es que Marcus Coker, su líder corredor, está suspendido tras violar el código de conducta del equipo. Y les dolerá no contar con él. Coker corrió para 1,384 yardas y 15 TDs en el año, además de que sumó 219 y 2 TDs en el Insight Bowl 2010.
Con esto los corredores que están activos para Iowa son poco confiables. Ningún elemento que participará esta noche tiene más de 80 yardas en año, así que la defensiva de Oklahoma no debe tener problemas evitando el ataque terrestre.
James Vandenberg, el QB de Iowa, es entonces la pieza clave en el partido. Vandenberg, que tuvo 23 TDs y 6 intercepciones en el año, buscará especialmente a Marvin McNutt, líder receptor del Big Ten con 1,269 yardas y 12 TDs.
Vandenberg y McNutt tratarán de quebrar la inconsistente defensiva de Oklahoma, que permitió 29.7 puntos y 449.2 yardas en sus últimos seis encuentros.
Esta será la segunda aparición en el Insight Bowl para ambas instituciones. En su único duelo (1979) previo Oklahoma ganó 21-6.
El pronóstico de Formación Escopeta: Oklahoma 23-17 Iowa
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