El Texas Bowl tendrá como invitados a dos equipos que no están muy acostumbrados a jugar a estas alturas de la temporada. Por eso la edición 2010 de este tazón es sumamente intrigante: porque no hay muchos recuerdos de estos dos equipos jugando a finales de diciembre.
Baylor (7-5) tuvo su primera temporada ganadora desde 1995 y están jugando un tazón por primera vez desde 1994, año en que perdieron el Alamo Bowl con Washington State.
"Es exactamente lo que teniamos que hacer o sentiamos que teniamos que hacer como equipo," dijo el coach Art Briles. "Necesitábamos dar un paso al frente en el progreso de nuestro programa y lo hicimos. Han sido 16 años desde nuestro último tazón y nuestra gente está entusiasmada, con mucha razón, porque cuando has visto las cosas desde afuera y tienes la oportunidad de entrar, es un gran sentimiento."
Para Illinois la sequía no es tan larga, ya que su última aparición en un tazón vino en el 2008, pero fue un juego que muchos quisieran olvidar. En aquella ocasión perdieron por 49-17 contra USC en el Rose Bowl. La última vez que los Fighting Illini ganaron un tazón fue en 1999, cuando derrotaron 63-21 a Virginia en el MicronPC.com Bowl.
"Es una oportunidad de regresar a este asunto de los tazones," dijo Ron Zook. "Nuestros jugadores y coaches están emocionados por esta oportunidad."
Ambos equipos son dirigidos por QBs jóvenes y RBs dinámicos, por lo que se espera un duelo de ofensivas, en especial considerando que ambas defensivas han sido inconsistentes.
La defensiva de Illinois acepta en promedio 24.3 puntos por partido, y durante el año aceptaron 67 de Michigan y 38 de Minnesota. La ofensiva de Baylor promedia 32.6 puntos por encuentro, y son el equipo número 12 en yardas por juego (478.5), por lo que se espera un reto muy grande para los Illini.
Robert Griffin III es el séptimo mejor QB de la nación con 315.5 yardas de ofensiva total, pero tuvo muchos problemas en el cierre de la temporada. Aún así detenerlo es una prioridad para Illinois. El principal objetivo de Griffin será encontrar a Kendall Wright, que tuvo 66 recepciones para 825 yardas, aunque tiene 4 jugadores que tuvieron al menos 40 recepciones en la temporada, por lo que podemos esperar que Baylor reparta el ovoide por todo el terreno.
El otro elemento a seguir por Baylor es Jay Finley, que tuvo 1,155 yardas por tierra, la segunda mejor marca en la historia de la universidad.
Para Baylor el problema será enfrentar con su defensiva al ataque de los Illini. Sobre todo recordando que aceptaron más de 40 puntos seis veces en el año.
La ofensiva de Illinois promedia 32.1 puntos por encuentro bajo el mando del coordinador ofensivo Paul Petrino, que ha hecho un gran trabajo con Mikel Leshoure, que es líder del Big Ten con 1,513 yardas por tierra y 14 TDs. Leshoure promedia 126.1 yardas por encuentro en la temporada, octava mejor marca de la NCAA en el año.
En las cuestiones históricas, este será apenas el segundo enfrentamiento entre estas dos universidades. Baylor ganó el único enfrentamiento por 34-19 en 1976.
Este será el primer Texas Bowl para ambos equipos.
El pronóstico de Formación Escopeta: Baylor 30-27 Illinois.
Blogalaxia: NCAA Futbol Americano Tazones Colegiales BCS
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