Lo destacado en Formación Escopeta



martes, 5 de enero de 2010

La Fiesta fue de Boise State

Image Hosted by ImageShack.us

La primera vez que Boise State estuvo en el Fiesta Bowl necesitaron de un par de trucos para vencer a Oklahoma.

Esta vez solo necesitaron de uno.

Con un engaño de despeje en su propia yarda 33, los Broncos mantuvieron viva una serie que eventualmente puso el TD de la victoria por 17-10 sobre TCU en el Fiesta Bowl 2010, lo que le da a los Broncos su segundo título en este juego.

La jugada, que se conoce como "Riddler" (algo así como "acertijo") vino en una cuarta y nueve en la yarda 33 de Boise. El partido estaba empatado a 10 y los Broncos no tuvieron ningún problema en mandarla. Kyle Brotzman, pateador de despeje de los Broncos, encontró a Kyle Efaw (foto del cabezal) para un avance de 30 yardas.

"Que mandaramos ese engaño fue algo atrevido," dijo Brotzman. "Ese es el football de Boise State".

Y de la nada el juego estaba resuelto. Kellen Moore, QB de los Broncos, conectó con sus receptores en tres ocasiones consecutivas para poner a su equipo en la 2 de TCU, para que Doug Martin anotará en un salto que puso el encuentro 17-10 con 7:21 por jugar.

"Nuestros coaches son creativos y mandan cosas así y funcionan la mayor parte del tiempo," dijo Efaw. Y aunque en esta ocasión solo fue una jugada, los recuerdos de aquel Fiesta Bowl ante Oklahoma se hicieron presentes. Y le dieron emoción a un encuentro que había estado muy cerrado y extrañamente dominado por las defensivas de ambos bandos.

Boise State y TCU eran dos de los mejores 4 equipos de la NCAA en puntos (44.2 Boise, 40.7 TCU), pero durante la mayor parte del juego lo único que pudieron hacer fue intercambiar despejes. El juego se había ido 10-7 favor Boise en la primera mitad, y en el tercer cuarto lo único que movió el marcador fue un gol de campo de Ross Evans para empatar el encuentro a 10.

Después de la serie de Boise que incluyó el engaño de despeje y la anotación, el juego volvió a su estado anterior de duelo defensivo.

Con 1:06 por jugar y el balón en su yarda 1 TCU intentó el regreso que mandara el partido a tiempo extra. Y todo iba saliendo bien para los Horned Frogs, que llegaron a la yarda 30 de Boise. Pero un pase de Dalton fue desviado por el esquinero Brandyn Thompson, dejando el balón en el aire apra que Winston Venable lo interceptara. Con 18 segundos en el reloj lo único que los Broncos tenían que hacer era hincarse.

Thompson fue clave en el encuentro, más allá de esa jugada al final. Él tuvo la intercepción devuelta para anotación que puso el juego 7-0, y la serie de la victoria de Boise comenzó con su segunda intercepción.

Con esto Boise State (14-0) se une a Ohio State como los únicos equipos que han logrado terminar una temporada con marca de 14-0. Y esa no fue la única cuestión histórica en el juego de ayer.

Por primera vez en la historia del BCS dos equipos de Conferencias que no tienen boletos directos lograron ser invitados a uno de los tazones principales. Y no solo eso, este fue el primer tazón que enfrentaba equipos invictos que no fuera el juego por el campeonato nacional.

La victoria de Boise State ayer les da su segundo triunfo en un tazón del BCS, algo que equipos de mucha tradición como Michigan, Penn State y Alabama no han logrado.

Y aunque son uno de los 3 equipos que siguen invictos en estos momentos (Texas y Alabama, finalistas de este año, son los otros dos) no hay manera de que aspiren al campeonato nacional. Después de todo, el hecho de llegar al BCS ya se considera un "premio" a la temporada de los Broncos desde la perspectiva de las conferencias y los equipos "grandes".

Esas mismas conferencias y equipos que no quisieron jugar contra ellos o contra TCU este año en uno de esos tazones del BCS.

Lee más:
Fiesta Bowl 2010 (previa)


Bitacoras.com:

No hay comentarios: