El partido de la semana es, sin lugar a dudas, el de este lunes entre Rams y Chiefs. Y lo que lo hace más atractivo es el hecho de que se verán las caras dos de las mejores ofensivas de la liga (no podemos decir "las dos mejores" porque los Saints existen), porque las defensivas han dejado mucho que desear.
Una de las áreas más preocupantes para los Rams es su defensiva secundaria, donde las adiciones de Marcus Peters y Aqib Talib no tuvieron el efecto esperado, con Peters porque no ha jugado como se esperaba, y con Talib porque se lesionó.
Y aunque en la línea frontal las cosas tampoco funcionan del todo contra el juego terrestre (permiten 5.2 yardas por acarreo para ser últimos de la liga), sí hay algo positivo en el front seven: la presión al QB.
De acuerdo con datos de Pro Football Focus, los Rams están presionando al QB el 41.6 por ciento de las jugadas de pase, el mejor porcentaje en la temporada. Y aunque no se ha traducido completamente en sacks (los Rams son décimos de la liga con 26), sí es una señal de que los QBs contrarios no tienen mucho tiempo para lanzar.
Curiosamente uno pensaría que con tanta presión sobre el QB la defensiva contra el pase sería mejor, pero no. Y eso es lo que hace más preocupante la producción de la secundaria. De hecho ya vimos que pasa cuando un QB eficiente como Drew Brees puede hacer contra la defensiva de los Rams, ya que además Brees no recibió sack en contra.
Será interesante ver cómo responde la defensiva de los Rams este lunes, sobre todo porque Patrick Mahomes, el QB rival de esta semana, está teniendo una temporada impresionante hasta el momento.
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