Paul Chryst está tratando de armar un equipo competitivo en Pittsburgh. Por la forma en que jugaron dos de sus novatos, parece que no tardará mucho en lograrlo.
James Conner corrió para 229 yardas y Tyler Boyd tuvo 8 recepciones para 173, ayudando a que los Panthers vencieran 30-27 a Bowling Green en el Little Caesars Pizza Bowl.
Conner rompió la marca de más yardas terrestres para Pittsburgh en un tazón, y eso no es poco. La marca la tenia Tony Dorsett con 202 en el Sugar Bowl de 1977 contra Georgia. Curiosamente al año siguiente se impuso la marca de más yardas por recepción en un tazón para los Panthers, con Gordon James sumando 163 contra Clemson en el Gator Bowl. Tyler Boyd obviamente rompió la marca.
165 de las yardas terrestres de Conner vinieron en la segunda mitad, algo que sirvió de mucho por la lesión del QB Tom Savage, que tuvo que dejar el encuentro al medio tiempo por una lesión en las costillas. Chad Voytik jugó en lugar de Savage, y no lo hizo mal.
Bowling Green llegó a empatar el partido a 27 sobre el final del último cuarto, pero la ofensiva de Pittsburgh logró acercar el balón para dar la oportunidad de conseguir el gol de campo de la ventaja definitiva. Cuando la ofensiva de los Falcons quiso hacer lo propio terminaron regresando en el campo. De hecho se jugaron una cuarta y cuarenta, que después de varios pases laterales terminó con el balón saliendo por la banda para darle la posesión a Pittsburgh.
Esa serie defensiva que selló el triunfo de los Panthers contó con la participación del liniero defensivo All-Amercian Aaron Donald, que jugó su último partido con la universidad.
Por cierto, es probable que este haya sido el último Pizza Bowl de la historia, ya que los Detroit Lions anunciaron que organizaran su propio tazón para la próxima temporada.
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