Los Rams han tenido una buena dotación de selecciones altas en años recientes. Sam Bradford ha funcionado bien, Chris Long es estable. El que parece no ha dado lo esperado es Jason Smith, así que se viene una decisión importante con él.
Smith, que fue la primera selección de los Rams en el draft 2009 (segunda global), apenas ha jugado en 29 de 48 partidos.
Y cuando ha estado en el campo no ha sido el mejor de todos.
Smith fue tomado para ser el tackle izquierdo, pero no fue capaz de mantener la posición. En estos momentos los Rams usan como tackle derecho, así se presenta un conflicto para el equipo de St. Louis: pagarle 10 millones de dólares a su tackle derecho o mejor darlo de baja si no consiguen una reestructuración de contrato.
El proceso es sencillo, y se ha hecho mil veces en la liga. Un jugador puede reestructurar su contrato para cobrar menos ese año, redistribuir sus pagos a futuro o recibir el dinero que no cobró ahora en forma de bonos a futuro. Eso ayudaria a los Rams a mejorar su posición con respecto al tope salarial y de paso pondría el salario de Jason Smith en una cifra más acorde a su producción.
Obviamente el jugador se puede negar a cobrar menos. Eso obligaria a los Rams a darlo de baja. Como el salario garantizado de Smith es solo 1 millón de dólares, se puede hacer y no afectará mucho al equipo. Así que en esencia la decisión está en el jugador.
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