Toda la oleada de problemas que han rodeado a Ohio State llegaron a su fin hoy cuando la NCAA dió su veredicto sobre sus investigaciones. Y no es nada bueno para los Buckeyes.
La NCAA ha decidido dejar sin tazón colegial a Ohio State el próximo año, además de que incrementó los castigos que la universidad se habia impuesto previamente. En un principio los Buckeyes habían renunciado a su temporada 2010, devuelto el dinero ganado en el tazón de ese año y se habían quitado 5 becas por año durante 3 temporadas.
La asociación decidió poner a prueba a la universidad hasta el 2014, además de que les redujeron 3 becas por año desde ahora y hasta la temporada 2014-2015. El hecho de quitarles la elegibilidad para un tazón la próxima temporada es lo que en verdad le va a doler a los Buckeyes.
Todo el problema empezó cuando se descubrió que el QB Terrelle Pryor y otros elementos del equipo de football habían intercambiado jerseys y otros objetos de memorabilia por tatuajes y otros beneficios personales, todo con valor de varias decenas de miles de dólares. Las mismas investigaciones probaron que el coach del equipo, Jim Tressel, se enteró de lo sucedido y no lo reportó a las autoridades de la universidad.
"Estamos sorprendidos y decepcionados con la decisión de la NCAA" dijo Gene Smith, director atlético de OSU. "De cualquier forma, hemos decidido no apelar la decisión porque necesitamos seguir adelante como institución. Reconocemos que es un momento complicado. Las instituciones de educación superior están avanzando a lugares más elevados y Ohio State acepta su lugar de liderazgo y reafirma su compromiso con la excelencia en la eduación y la integridad en todo lo que hace."
Además de los castigos impuestos a la universidad, Jim Tressel (que de momento trabaja con los Indianapolis Colts) recibió una sanción que le prohibe ser coach a nivel universitario durante los próximos 5 años. El comité que llevó el caso consideró "muy decepcionante" el desempeño de Tressel en todo este escándalo, y por eso le dieron la sanción.
Si alguna universidad decide contratar a Tressel, debe demostrar a la NCAA el motivo específico por el cual es necesario contratarlo, y la universidad en cuestión estaría sujeta a severas sanciones si este volviera a cometer una violación al reglamento.
Y así concluye este lamentable episodio para Ohio State. Seguro que todos en la universidad esperan que Urban Meyer los pueda sacar del problema pronto.
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