Parece que por fin Jim Harbaugh tuvo oportunidad de analizar lo que el BCS significa y cómo afecta a las universidades.
El coach de la Universidad de Stanford está preocupado sobre el posible destino de su equipo en los tazones de final de temporada, sobre todo porque podrían terminar jugando en algún lugar que no forma parte de sus expectativas.
La cuestión es esta: el Cardinal está 11-1 en el año, con su única derrota viniendo ante (2) Oregon, y aún asi podrian terminar jugando en un tazón como el Alamo Bowl, aún cuando su récord les valdria para estar en el Rose Bowl.
De momento Stanford es cuarto en los rankings del BCS, lugar que les asegura un puesto en los tazones importantes.
"Estamos contentos de estar aquí," dijo Harbaugh. "Pero si algo nos saca de ese lugar en los próximos días entonces vas a tener a un tipo muy enojado en la próxima conferencia de prensa."
El equipo de Stanford ya terminó su temporada, así que ahora solamente le queda esperar que nadie los baje de su cuarto puesto, ya que caer podría poner en riesgo su lugar dentro de los tazones del BCS, que de entrada los está dejando del Rose Bowl.
Bajo las normas del Rose Bowl, los campeones del Big Ten y del Pac-10 deben jugar este partido. Si eso fuera cierto tendriamos un partido Wisconsin vs Oregon. Pero el BCS cambia las cosas.
Oregon es el número 2 del ranking, por lo que no irán al Rose Bowl y en lugar de eso jugarán la final nacional. Entonces la lógica indica que el segundo lugar del Pac-10 debe ir al Rose Bowl.
No tan rápido.
Por el reglamento del BCS el Rose Bowl debe tomar al equipo mejor rankeado, y ese es TCU. Entonces Stanford se queda fuera de jugar el tazón que en esencia les tocaba. Y estando en cuarto lugar les toca esperar a ver que tazón los invita.
El Sugar Bowl podría invitar a (6) Ohio State, que está empatado con Wisconsin en el primer lugar del Big Ten. Otra opción es Arkansas, que es una opción si Auburn termina jugando la final nacional. Y siendo sinceros, tanto Arkansas como Ohio State son equipos con aficiones más grandes que Stanford, por lo que son opciones mucho más atractivas para el Sugar Bowl.
El Orange Bowl, otra opción para Stanford, podria optar por tomar a un equipo del Big XII (Nebraska u Oklahoma), ya que además de ser equipos de tradición son escuadras con nexos a este tazón. Y el que tengan aficiones enormes ayuda aún más.
Por lo tanto es posible pensar que el BCS pudiera dejar fuera a Stanford, enviándolo al Alamo Bowl.
"Si el poderoso dolar es parte de lo que decide quienes son los mejores equipos en el campo de juego, entonces apuntenme para un playoff," dijo. "No lo puedo decir de manera más enfática."
Bitacoras.com: NCAA Futbol Americano
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