El BCS National Championship Bowl 2010 ya es historia y tenemos campeón. El Alabama Crimson Tide ganó por 37-21 a Texas y con eso se proclaman campeones después de 17 años de no hacerlo.
Y aunque habrá quienes digan (con mucha razón) que la lesión de Colt McCoy fue clave para que los Longhorns se vinieran abajo, hay que decir algo: la derrota de Texas estuvo en muchos otros puntos.
Primero que nada, los Longhorns son un equipo que depende demasiado del pase. Que digo demasiado, pasan de forma excesiva. Y eso es un problema en casos como el de ayer, que se quedan sin su QB. Un ataque más balanceado les hubiera permitido jugar de forma más "natural" ante la salida de McCoy, o al menos no los hubiera obligado a poner el juego en manos de un QB novato.
Que Garrett Gilbert haya tomado ritmo hasta casi el final del partido también es lógico, y hubiera sido excelente para los Longhorns si hubieran podido establecer un ataque terrestre constante. Pero si tu líder corredor tiene poco más de 500 yardas en el año estás en problemas. Y peor aún si tu segundo mejor corredor es el QB que se lastimó.
Otro problema para los Longohorns fue que no pudieron detener al ataque terrestre de Alabama. Y estó demostró que las estadísticas en la NCAA son tan útiles como una evaluación de Mark Sanchez hecha por Enrique Garay: Texas era la mejor defensiva terrestre de toda la liga (120 equipos), pero se veían fatales contra las carreres de Mark Ingram y compañía. El Crimson Tide eventualmente terminó ganando más de 200 yardas por tierra y dejando en el terreno a un equipo que no está acostumbrado a enfrentar a conjuntos de corte terrestre.
Y Alabama demostró una vez más que hoy por hoy la SEC es la mejor conferencia del football colegial. Los últimos cuatro campeones nacionales han salido de ahí: Florida en 2006 y 2008, LSU en el 2007 y 'Bama ahora. Son ya cuatro las veces que el equipo campeón de la SEC se levanta con el título nacional, y si me adelantan, les podría pronosticar un quinto año. Después de todo el Pac-10, el Big Ten, el Big East y el Big 12 no lucen muy sólidos.
Y el BCS se encarga de mantener "a raya" a los equipos que podrían representar un peligro, como TCU, Boise State o Utah. Así que todo luce tranquilo para los conjuntos del Sureste.
En pocas palabras, parece que se avecina una marea alta en el football colegial.
Lee más:
BCS National Championship Bowl 2010 (previa)
Bitacoras.com: NCAA Futbol Americano Tazones Colegiales BCS
Y aunque habrá quienes digan (con mucha razón) que la lesión de Colt McCoy fue clave para que los Longhorns se vinieran abajo, hay que decir algo: la derrota de Texas estuvo en muchos otros puntos.
Primero que nada, los Longhorns son un equipo que depende demasiado del pase. Que digo demasiado, pasan de forma excesiva. Y eso es un problema en casos como el de ayer, que se quedan sin su QB. Un ataque más balanceado les hubiera permitido jugar de forma más "natural" ante la salida de McCoy, o al menos no los hubiera obligado a poner el juego en manos de un QB novato.
Que Garrett Gilbert haya tomado ritmo hasta casi el final del partido también es lógico, y hubiera sido excelente para los Longhorns si hubieran podido establecer un ataque terrestre constante. Pero si tu líder corredor tiene poco más de 500 yardas en el año estás en problemas. Y peor aún si tu segundo mejor corredor es el QB que se lastimó.
Otro problema para los Longohorns fue que no pudieron detener al ataque terrestre de Alabama. Y estó demostró que las estadísticas en la NCAA son tan útiles como una evaluación de Mark Sanchez hecha por Enrique Garay: Texas era la mejor defensiva terrestre de toda la liga (120 equipos), pero se veían fatales contra las carreres de Mark Ingram y compañía. El Crimson Tide eventualmente terminó ganando más de 200 yardas por tierra y dejando en el terreno a un equipo que no está acostumbrado a enfrentar a conjuntos de corte terrestre.
Y Alabama demostró una vez más que hoy por hoy la SEC es la mejor conferencia del football colegial. Los últimos cuatro campeones nacionales han salido de ahí: Florida en 2006 y 2008, LSU en el 2007 y 'Bama ahora. Son ya cuatro las veces que el equipo campeón de la SEC se levanta con el título nacional, y si me adelantan, les podría pronosticar un quinto año. Después de todo el Pac-10, el Big Ten, el Big East y el Big 12 no lucen muy sólidos.
Y el BCS se encarga de mantener "a raya" a los equipos que podrían representar un peligro, como TCU, Boise State o Utah. Así que todo luce tranquilo para los conjuntos del Sureste.
En pocas palabras, parece que se avecina una marea alta en el football colegial.
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BCS National Championship Bowl 2010 (previa)
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2 comentarios:
Es es el problema de los QBs "spread"....podran pasar y correr muy efectivamente, pero cuando se enfrentan a una defensa muy dura tipo NFL se ven las consecuencias...ese es otro de los motivos por los cuales McCoy y Tebow no podrian tener exito en la NFL...y los Crimson Tide tiene una defensa muy parecida a la NFL....lo mejor que podria hacer texas era mantener a tu QB en la bolsa de proteccion y esperar lograr algo por aire..que por tierra se encargen los RBs....pero como no esta en su plan de juego..el partido estaba acabado antes de empezar-saludos..!!
morí con lo de enrique garay xD
el sujeto jura que mark sanchez puede ganar el novato ofensivo del año :')
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