Michael McCaskey, que fuera presidente y CEO de los Chicago Bears, murió el día de ayer a la edad de 76 años tras una larga batalla con el cáncer.
McCaskey era nieto de George Halas y el hijo mayor de Virginia McCaskey.
"Mike ya era exitoso en todo el sentido de la palabra cuando tomó el control del equipo después de la muerte de 'Papa Bear' en 1983. Estamos agradecidos porque Mike estuvo al frente del que tal vez es el mejor equipo de la historia, y por todos sus años de servicio para los Bears y nosotros. El mayor de 11 hermanos siempre recibirá muchas responsabilidades, no todas placenteras, pero Mike las manejó todas con gracia y paciencia. Aunque la muerte de Mike no fue causada por el novedoso coronavirus, su familia, como muchos otros, no podemos reunirnos en estos momentos para lamentar su pérdida. Nuestros corazones están con todos aquellos que han perdido a un ser querido por el COVID-19. Nuestro enfoque en los próximos días será en celebrar la vida de Mike y ser una fuente de apoyo para John y Kathryn, así como para todos a los que él quiso." dice el comunicado emitido por la familia McCaskey.
Michael McCaskey se graduó de Yale en 1965, trabajo en los Peace Corps, obtuvo un doctorado en Case Western Reserve y luego dio clases en UCLA y Harvard. Posteriormente se unió al negocio familiar, donde fue CEO hasta 1999. Se mantuvo como presidente del equipo hasta 2011.
"Mi corazón duele al pensar en Michael McCaskey y no puedo creer que ya no esté con nosotros. Su feroz amor por los Bears no tenía igual, así como su capacidad intelectual y su sed de conocimiento en una miriada de temas. Michael tenía una presencia profesoral que podía ser retadora, pero también inspiradora. Siempre estaré agradecido con él por todas las oportunidades de crecimiento que me dio, así como por su confianza y apoyo. Michael siempre quiso hacer las cosas de la forma correcta y con los mejores intereses de los Bears siempre al tope. Michael era un buen hombre, se fue muy pronto. Fue presidente del único equipo campeón del Super Bowl de los Chicago Bears en 1985, y sé que todavía sonríe al recordar esa temporada mágica. Dios bendiga a Michael y su familia." declaró Ted Phillips, CEO y presidente de los Bears.
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