Cuando Oregon perdió con Stanford sus aspiraciones de un título nacional quedaron en terapia intensiva. El día de hoy ante Arizona quedaron oficialmente muertas y sepultadas.
Los Wildcats corrieron para 307 yardas, de las cuales 206 vinieron por parte de Ka'Deem Carey, en la victoria de 42-16 sobre los Ducks, que oficialmente quedan fuera de cualquier posibilidad de llegar al juego por el campeonato nacional. Vamos, ya ni siquiera pueden pensar en el Rose Bowl.
Marcus Mariota, que era considerado un candidato al Heisman, lanzó su primer intercepción en 353 intentos en la primera jugada de pase del encuentro. Al final se quedó con 308 yardas y 2 intercepciones. Desde esa primera jugada las cosas fueron cayendo para Oregon, que de repente se encontró abajo en el marcador 21-3 y nunca se pudieron reponer.
Con este resultado Arizona (7-4) está en posición de lograr su primera temporada de 8 victorias desde el 2009, mientras que Oregon (9-2) tendrá que lamentar lo sucedido en este partido y esperar su invitación a un tazón menor.
Y bueno, seguramente más de un aficionado de los Ducks verá mañana a los Eagles en la NFL con un suspiro por el coach que ahora dirige a Philadelphia.
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