"Soy un Hall of Famer. Mis números son mejores que los de Troy Aikman" dice Donovan McNabb

Donovan McNabb siempre ha sido muy claro en su postura de que él merece estar en el Salón de la Fama, y ahora está dando datos que apoyan su postura.

"Soy un Hall of Famer. Mis números lo demuestran. Mis números son mejores que los de Troy Aikman." dijo McNabb a TMZ.

Y aquí es dónde viene uno de los grandes debates de la historia: ¿qué tan válido es poner a un jugador en el Hall of Fame basándose solamente en las estadísticas?

Porque de inicio sí, McNabb tiene mejores números que Aikman. Si nos vamos enteramente por el lado de las estadísticas entonces McNabb merece entrar al Hall of Fame partiendo del principio de que Aikman ya está dentro. Pero si analizamos otros aspectos entonces las cosas no son tan claras.

Cuando Aikman llegó a la NFL (1989)el rating promedio en la liga era 75.6, mientras que en el año de novato de McNabb (1999) ese número había subido a 77.1. Cuando McNabb se retiró en 2011 el rating promedio ya había subido hasta 84.3, por lo que es fácil notar que la efectividad de los QBs ha mejorado con el tiempo en gran parte porque la liga se ha inclinado cada vez más hacia el juego por pase.

Vamos a poner esto en otra perspectiva: Terry Bradshaw, QB de los Steelers en la década de los años 70, solamente tuvo dos temporadas de más de 3,000 yardas en su carrera. Matthew Stafford de los Lions, que no ha tenido una carrera igual de exitosa que Bradshaw, tiene siete temporadas con más de 4,000 yardas (con una de ellas rebasando las 5,000). Si nos vamos a ir por el puro asunto estadístico, Stafford ya es un Hall of Famer por el simple hecho de tener mejores estadísticas que Bradshaw.

De hecho Stafford ya tiene más yardas por pase que McNabb en estos momentos, superándolo por casi 1,200 yardas, así que en teoría Stafford merece el Hall of Fame más que McNabb.

Y si encima ponemos en la mesa el tema de los campeonatos el argumento de McNabb es mucho menos válido. McNabb llegó a un Super Bowl en su carrera (que los Eagles perdieron con los Patriots), mientras que Aikman llevó a los Cowboys a tres campeonatos en cuatro años durante la década de los 90.

Así que hay muchas maneras de ver las cosas, y elegir jugadores al Hall of Fame nunca es fácil. Y por eso queda claro que no se pueden simplificar tanto las cosas, porque de hacerlo así cualquier argumento haría válidas todas las candidaturas.