Marquette King fue dado de baja por los Raiders y rápidamente encontró trabajo con los Broncos. Y por cómo las cosas se dieron, King nunca tuvo la oportunidad de conocer a Jon Gruden.
"Solamente lo he visto en comerciales de autos y cosas así. Ahora lo podré ver dos veces al año." dijo King en una conferencia que dio para los reporteros de Denver.
King firmó por tres años y siete millones de dólares con los Broncos. Y eligió jugar en Denver porque era la mejor opción, aunque, obviamente, "Hay algo de revancha en todo esto", dijo.
Ahora que es parte de los Broncos no podrá ocupar el número 7, y avisó que tampoco volverá a celebrar "montando al bronco", como lo hacía en Oakland. "Es hora de encontrar una nueva celebración, porque esa era para tratar de molestarlos a ustedes," dijo King a los reporteros.
Eso sí, los castigos de actitud antideportiva son cosa del pasado, dijo.
"Voy a seguir divirtiéndome. Voy a seguir bailando y celebrando. Voy a ser yo mismo. Nada me va a detener de hacer eso. Los castigos - tuve tres castigos hace dos años y uno el año pasado - eso está en el pasado. Ansío poder hacer mi trabajo y estoy trabajando en mi comportamiento y en hacer las cosas de la manera adecuada para que el equipo esté en la mejor situación posible." dijo.
King añadió que Denver es "el paraíso de los punters" por la altitud, además de que la organización es un gran plus.
"Lo más cool de los Broncos es que las personas que trabajan con los Broncos te motivan para ser tú mismo. Eso es muy cool. Los jugadores juegan mucho mejor cuando pueden ser ellos mismos. Es cool. Lo motivan. Pero no, no creo que esa haya sido la razón de mi partida en Oakland. Todos tienen su manera de hacer las cosas. Tal vez así es cómo ellos quieren hacer las cosas."
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