Cuando surgió la noticia de que la NFL había encontrado pruebas de que se llevaba a cabo un "programa de botines" en los Saints, dirigido por el coordinador defensivo Gregg Williams, surgió una pregunta: ¿y en los otros equipos dónde Williams trabajó? Parece que la historia va para atrás, y la primera parada es Washington.
Ya han surgido varios ex-jugadores de los Redskins diciendo que sí, que efectivamente en la época de Williams se usaba ese sistema de pagos por lesionar jugadores contrarios. Y como la NFL dice no saber nada del tema, llevarán a cabo una investigación.
El problema más grande será para Williams, que durante sus declaraciones posteriores al surgimiento de la noticia en New Orleans en esencia dijo "esta es la primera vez que pasa algo así en una de mis defensivas". Si Gregg Williams mintió a la NFL sobre cuándo usó está "técnica de motivación" entonces debe venir un castigo más duro de lo esperado.
Vamos, es un hecho que muchos jugadores de los Saints serán suspendidos. Sean Payton y Mickey Loomis también están ante la posibilidad de ser suspendidos por no reportar estos hechos. Y Williams, aunque ahora trabaja para los Rams, también será castigado. Pero en su caso las cosas podrían (y deberían) ser peores.
Y la posibilidad más lógica es que la suspensión a Gregg Williams no sea de unos cuantos juegos ni una temporada entera. Lo deben suspender de por vida.
Seguramente es lo que pedirán jugadores que salieron lesionados en un partido contra los Saints. Kurt Warner, por ejemplo.
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