Esta no ha sido la mejor temporada en la historia de Georgia, pero los Bulldogs no se pueden quejar: acaban de asegurar su boleto al juego de campeonato de la SEC, algo que no lograban desde el 2007.
Mark Richt hizo magia con este equipo tras empezar 0-2 la temporada, y ahora con el triunfo de 19-10 sobre Kentucky están otra vez en la pelea por el título de su conferencia. El problema es que su rival será un auténtico "peso pesado": LSU, Alabama o Arkansas.
Pero esto no es algo que Georgia quiera discutir en estos momentos. Los Bulldogs aprovecharon la debilidad que plagó a la SEC East esta temporada y ganaron el boleto para ir a jugar a Atlanta. Ganar la conferencia es algo que se puede discutir (y soñar) después.
Vamos, se pueden quedar tranquilos en estos momentos. Empezaron 0-2 y al perder su conferencia van a conseguir una buena invitación a un tazón. Eso es más que suficiente.
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