El Big Ten decidió suspender su temporada el 11 de Agosto porque tenían preocupaciones por la situación del país ante la pandemia de COVID-19, pero al parecer la presión para que reconsiderarán la decisión hizo efecto.
Tras una nueva serie de reuniones, la conferencia ha decidido regresar a jugar este mismo año, con la temporada programada para comenzar el fin de semana del 24 de Octubre.
"Nuestro enfoque en las últimas seis semanas ha sido el garantizar la seguridad y salud de nuestros estudiantes-atletas. Nuestra meta siempre ha sido regresar a la competencia para que todos los estudiantes-atletas puedan lograr su sueño de competir en el deporte que aman. Estamos increíblemente agradecidos por el trabajo colaborativo que la Fuerza de Trabajo para Regresar a la Competencia ha logrado para asegurar la salud, seguridad y bienestar de los estudiantes-atletas, coaches y administradores." declaró Kevin Warren, comisionado del Big Ten.
El punto que cambió las cosas para el Big Ten es la disponibilidad que hay para realizar pruebas rápidas contra COVID-19, ya que las escuelas creen que eso ayudará a controlar los riesgos de infección dentro de los equipos.
Ahora, otro punto importante es que tres de las cinco conferencias del Power Five (SEC, Big 12 y ACC) están jugando, así que eso también generar una presión adicional para el Big Ten, ya que cuando ellos y el Pac-12 anunciaron la suspensión de sus respectivas temporadas se pensaba que el paso lógico era que las demás conferencias los siguieran, y eso no pasó.
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