El status de Aaron Rodgers para el partido del domingo contra Minnesota es claro: día a día. Y hasta ahora estos días dicen más o menos lo mismo: muy poco.
De acuerdo con el reporte de lesionados del equipo Rodgers no ha entrenado ni ayer ni hoy. Ha estado trabajando en rehabilitar su rodilla y otras cosas, pero no ha entrenado.
Una de las cosas más llamativas con esta lesión de Rodgers es que nadie sabe a ciencia cierta qué tiene. Y eso hace menos sencillo el dar un pronóstico. De momento parece que va a jugar, básicamente porque es lo que él ha dicho. Pero oficialmente no se sabe mucho.
De hecho lo único que Aaron Rodgers ha dicho es que no necesita entrenar para jugar.
Y por lo visto el domingo pasado, tampoco necesita de ambas rodillas para jugar bastante bien.
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