Desde que se hizo oficial que los Seahawks iban a recibir los playoffs en casa se sabía que iba a ser muy complicado ganar de visitante. Los Saints pudieron confirmar eso ayer.
Cierto, no fue la paliza que recibieron en temporada regular, pero sí fue otro encuentro donde la defensiva de Seattle se impuso y Marshawn Lynch se encargó de sellar el juego, para que los Seahawks vencieran 23-15 a los Saints.
La victoria de Seattle vino en gran parte porque su defensiva hizo un excelente trabajo, sobre todo neutralizando a Jimmy Graham. El ala cerrada de los Saints se fue con tan solo una recepción y New Orleans pudo romper el cero en el marcador hasta el último cuarto.
Marshawn Lynch hizo su parte al ataque sumando 140 yardas en 28 acarreos y anotando los dos TDs de los Seahawks, incluido uno en una escapada de 31 yardas para poner la ventaja de 23-8 con 2:48 en el reloj.
Los Saints tuvieron un partido con muchos errores. Shayne Graham falló dos goles de campo, Thomas Morstead tuvo un despeje de 16 yardas en el primer cuarto, Mark Ingram soltó un balón que dejó la mesa para el primer TD de Lynch y en general la ofensiva nunca encontró el ritmo (o las jugadas adecuadas) para poder vencer a los Seahawks.
A pesar de eso hubo una pequeña oportunidad de que los Saints hicieran algo. Con el marcador 23-15 y con 23 segundos en el reloj, los Saints recuperaron una patada corta y tuvieron un intento más a la ofensiva. El problema fue que Drew Brees conectó con Marques Colston, y el WR en lugar de salir por la banda (que esaba junto a ella), intentó un pase lateral que fue notablemente adelantado. Cuando Colston lanzó ese ovoide (provocando un castigo), quedaban 4 segundos. El castigo, por ser en los dos minutos finales, provoca un descuento de 10 segundos en el reloj, lo que dio por terminado el encuentro.
Al final las estadística pueden engañar un poco, ya que los Saints tuvieron más yardas totales que los Seahawjs (409 contra 277), pero la realidad es que la mayor parte de la producción de New Orleans vino con el partido lejos de su alcance.
Los Seahawks ahora esperan conocer a su rival para la final de la NFC, que saldrá del encuentro entre 49ers y Panthers. Eso sí, sea quien sea debe alistarse para ir al Century Link Field.
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