La noche de ayer, mientras la NFL terminaba de celebrar su semana de inicio con doble cartelera de Monday Night, salió la noticia de que el partido Pumas UNAM vs Aguilas Blancas IPN, el clásico del football en México, se iba a jugar a puerta cerrada. En ese momento la noticia me sorprendió, luego pregunté en twitter que opinaba la gente y la respuesta fue abrumadora: hay indignación ante la decisión. Y hoy que vuelvo a analizar la situación, no me queda más que preguntar: ¿en serio?
¿En serio no queda otra opción? ¿En serio se trató de organizar este juego con público? Porque me parece que algo no encaja.
Corríjanme si estoy mal, pero el año pasado el partido se llevó a cabo con público y aquí seguimos. Hasta donde yo sé no hubo problemas en la edición del año pasado, al menos nada que pusiera a este encuentro en los reflectores de forma negativa.
Entonces... ¿en serio se buscó organizar el partido con público?
Personalmente creo que sí, definitivamente siempre hay amenaza de problemas en este juego. Eso es algo que no se puede evitar, aunque deberiamos de lograrlo. Las autoridades de ambas instituciones deberían trabajar un poco más duro en fortalecer la seguridad para este partido y no simplemente irse por la sálida fácil, que es cerrar las puertas para el juego. Eso, en mi muy particular opinión, es la peor manera de resolver las cosas.
¿Qué no estamos hablando de dos de las máximas casas de estudio en nuestro país? ¿No se supone que en la UNAM y el IPN están miles de estudiantes que trabajan diario por cambiar a este país? ¿Desde cuando ser alumno de estas dos universidades es sinónimo de ser irracional e incapaz de comportarse en un evento masivo? ¿En serio así son los estudiantes de estas dos instituciones? ¿En serio así son los fans de Pumas y Aguilas Blancas?
¿Será eso o estamos ante un caso de vil apatía por parte de las autoridades responsables de organizar este evento?
Quiero creer que es lo último. Quiero creer que el Pumas - Poli se puede jugar en cualquier campo, con cualquier número de aficionados y a cualquier hora. Quiero creer que los porros no son más que los aficionados reales de este deporte. Quiero creer que, con otra mentalidad y disposición por parte de las autoridades de ambas instituciones, el clásico será noticia solamente porque es sinónimo de un gran encuentro.
Lo quiero creer. En serio.
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