La noche de ayer surgió el reporte de que los Giants están tratando de cambiar al receptor Kadarius Toney.
Según reporta Pat Leonard del New York Daily News, los Giants han estado llamando a otros equipos para tratar de averiguar cuánto podrían obtener en un posible cambio por el receptor que tomaron en la primera ronda del Draft pasado.
Al parecer la decisión de Toney de no participar en los trabajos voluntarios de offseason fueron el último clavo en el ataúd del jugador. Según indica Leonard hubo momentos de la temporada pasada donde los Giants consideraron deshacerse del jugador. El problema fue que se cuestionó su nivel de compromiso en su primer año, sobre todo en el tema del estudio del playobbok, además de su conducta en las juntas y sus frecuentes lesiones.
Los problemas de salud de Toney fueron diversos: primero tuvo problemas en el pie que limitaron su trabajo durante la primeravera, algo que se complicó porque tardó en firmar su contrato de novato. Luego tuvo COVID-19 y una lesión en el tendón de la corva durante el training camp. A inicios de la temporada Toney expresó su malestar con la forma en que era usado en la ofensiva y terminó perdiéndose seis de los últimos siete partidos por otro caso de COVID-19 aunado a una lesión en el oblicuo y en el hombro.
Sus problemas de carácter también se vieron en el campo, cuando fue expulsado en un partido ante los Cowboys por lanzar un golpe.
Al final Toney terminó con 39 recepciones para 420 yardas en el año, y considerando todo no es tan sorpresivo que el equipo esté pensando en darle la vuelta a la página tan rápido.
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