En las nuevas reglas del tiempo extra se especifica que el partido se termina si uno de los equipos anota TD, aunque el otro no haya tenido oportunidad de ir a la ofensiva. Ejemplo en práctica: los Colts sobre los Titans.
Con el partido empatado a 13 puntos por bando, Colts y Titans se fueron a la extensión. Indianapolis comenzó con el ovoide, y en su serie ofensiva Andrew Luck conectó un pase pantalla con Vick Ballard, que se escapó 16 yardas para luego lanzarse a la zona de anotación. Los árbitros revisaron la jugada (como se hace con todas las anotaciones) y mantuvieron la jugada. Con eso se puso final al encuentro, con victoria de 19-13 para los Colts.
Para Tennessee las cosas no salieron como en semanas anteriores. Cierto, Chris Johnson tuvo 99 yardas y Matt Hasselbeck completó 22 de 29 pases para 236 yardas, pero la ofensiva cometió algunos castigos en malos momentos y se fueron deteniendo. Que Rob Bironas haya fallado un gol de campo de 47 yardas en la segunda mitad del encuentro pesará, pero los Titans tuvieron muchas oportunidades de hacer puntos.
Andrew Luck, por su parte, tuvo 26 de 37 pases para 297 yardas con 1 TD y 1 INT, y aunque al inicio se vio dudoso, fue tomando ritmo y al final la ofensiva de los Colts movió bien el ovoide para empatar el juego en el último cuarto y ganar en el tiempo extra. Donald Brown aportó 80 yardas por tierra en su regreso, complementando a Ballard, que había estado llevando la carga en semanas pasadas.
Con este resultado los Colts se ponen 4-3, ya el doble de triunfos del año pasado. La próxima semana tendrán un duelo bastante interesante contra los Dolphins (4-3), otro equipo que ha sorprendido en la temporada.
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